Estudios sobre la pérdida de peso con L-carnitina

Los suplementos de L-carnitina se anuncian frecuentemente como potenciadores del rendimiento y productos prácticamente milagrosos para bajar de peso, pero la evidencia no apoya necesariamente esta reputación de la L-carnitina como quemador de grasas.

Excepto en los casos donde hay algún tipo de deficiencia, el hígado y los riñones producen toda la L-carnitina que necesita nuestro organismo. En el caso de déficit, éste puede requerir la administración de suplementos de l-carnitina si bien no se ha demostrado de forma concluyente si estos suplementos nutricionales dan lugar a una pérdida de peso de forma inequívoca.

Según el centro médico de la Universidad de Maryland, existen indicios anecdóticos de que la L-carnitina puede ayudar a reducir la fatiga y aumentar la pérdida de grasa, pero hasta que no haya pruebas definitivas en cuanto a la seguridad del suplemento y su eficacia, según este estudio no se puede recomendar como un medicamento para bajar de peso.

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El departamento de biología humana del Royal Melbourne Institute of Technology en Australia publicó un estudio en la edición de 2000 de la “Revista Internacional de Nutrición Deportiva y Metabolismo de Ejercicio” que planteó serias dudas sobre la validez de la L-carnitina como suplemento para bajar de peso. 

Las participantes en este estudio fueron mujeres con sobrepeso moderado; la mitad recibieron dos gramos de L-carnitina al día, mientras que la otra mitad recibió dos gramos de lactosa como placebo. Todas las participantes caminaron cuatro días a la semana manteniéndose al 60 al 70 por ciento de su frecuencia cardiaca máxima durante 30 minutos. 

Al final del estudio, ninguna de las mujeres mostró cambios estadísticamente significativos en la masa corporal o la masa grasa, y cinco de las mujeres que tomaron L-carnitina abandonaron el estudio después de tener diarrea y náuseas. El estudio concluyó que la L-carnitina probablemente no es eficaz para bajar de peso.

Más tarde, en el año 2000, el Departamento de Ciencias Clínicas de la Universidad de Cornell en Estados Unidos llevó a cabo otro estudio para evaluar los efectos de la L-carnitina en un grupo de gatos domésticos con sobrepeso. Los felinos se dividieron en dos grupos, uno recibió 250 mg. de L-carnitina líquida diariamente mientras que el otro grupo recibió agua corriente. Ambos grupos fueron alimentados únicamente con el 60 por ciento de las calorías necesarias para su tamaño. Pasadas 18 semanas, los gatos que recibieron L-carnitina perdieron alrededor del 23 por ciento de su peso, mientras que los gatos que recibieron agua corriente perdieron alrededor del 19 por ciento. El estudio concluyó que la L-carnitina parece ser un suplemento importante en la pérdida de peso para los gatos obesos, pero debido a que el grupo de control perdió peso casi tanto como el grupo que había tomado L-carnitina, se puede concluir que la restricción calórica severa tenían más que ver con ella. No está claro cómo este estudio se traduciría a los seres humanos, ya que los gatos y los humanos tienen diferentes fisiologías.

En 2002, el Instituto de Ciencias de la Nutrición de la Universidad alemana de Halle publicó un estudio en los “Anales de Nutrición y Metabolismo” que básicamente replicó el estudio de los gatos descrito anteriormente pero en esta ocasión utilizando ratas para comprobar el efecto de la L-carnitina y su acción de quemador de grasas.

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Las ratas recibieron diariamente una dieta restringida, y sólo la mitad recibió un suplemento de L-carnitina. Después de 23 semanas, todas las ratas perdieron peso debido a la restricción de calorías, y todas presentaron niveles más bajos de grasa corporal. Hubo poca diferencia entre las ratas que recibieron L-carnitina y las que recibieron un placebo, lo que llevó a los investigadores a concluir que la L-carnitina no se tradujo en la pérdida de peso adicional. De hecho, debido a que la dieta no contiene l carnitina y el grupo placebo mostró aún l carnitina en la sangre, llevó a los investigadores a pensar que el cuerpo fabrica toda la l-carnitina necesaria para quemar grasas.

En 2005, el Departamento de Kinesiología de la Universidad West Chester publicó un estudio en el “Diario Internacional de la Vitamina y de Investigación de Nutrición", que trató de explorar el efecto de la L-carnitina en el peso de las mujeres posmenopáusicas.

El estudio utilizó ratas cuyos ovarios habían sido extirpados, a las que se les permitió el acceso libre a comida enriquecida con L-carnitina. Un subgrupo de ratas aprendió a nadar para estudiar los efectos del ejercicio cardiovascular en la pérdida de peso. No sólo la L-carnitina no pareció acelerar la pérdida de peso, sino que las ratas alimentadas con L-carnitina incluso ganaron peso.